Con la llegada por extradición de 14 paramilitares provenientes de Colombia, éste es un buen momento para hablar del modo de seleccionar un abogado. Los acusados pueden sentirse abrumados cuando tienen que seleccionar un abogado porque es posible que no sepan qué es lo que deben buscar. Es como ir a comprar un traje nuevo. Uno va a la tienda por departamentos y hay cientos de dónde elegir. ¿Cómo puede uno distinguir los trajes buenos de los malos? ¿Y qué es lo que realmente hace que un traje sea “bueno”?
Cuando uno va a seleccionar un abogado, el criterio más importante es la experiencia en el tipo específico de derecho relacionado con su causa. Los abogados, al igual que los médicos tienen especialidades. El derecho penal es un campo muy amplio donde hay abogados que se especializan en todo tipo de causas, desde estupefacientes y lavado de dinero hasta delitos corporativos de guante blanco. Y muy parecido al modo en que los médicos ejercen su profesión en ciertos hospitales, los abogados ejercen su profesión en ciertos tribunales y distritos (hay tribunales federales y estatales). Un abogado que ejerce su profesión constantemente en el tribunal donde radica su causa estará familiarizado con los fiscales, los jueces y las prácticas de ese juzgado, y sabrá el “valor en plaza (o de venta)” de su causa en ese tribunal en particular. Ese abogado o abogada también podrá predecir el resultado más probable del caso. Sin embargo, un abogado que no ejerce su profesión con regularidad en ese tribunal también puede determinar el resultado más probable del caso hablando con otros abogados de ese distrito. Pero el sine qua non es que el abogado que usted seleccione se especialice en su tipo de causa.
¿Cómo encuentra usted un abogado cuya especialidad se relacione con su causa? Esto por lo general se hace porque se corre la voz. Otro modo de encontrar un abogado es mediante una búsqueda en la red (Internet). Pero una vez que usted encuentre un abogado a quien tendría interés en contratar, comuníquese con él o con ella y hágale unas cuantas preguntas. ¿Qué tipos de causa ha tenido el abogado? ¿Cuánto tiempo hace que el abogado ha estado ejerciendo su profesión? ¿En qué tribunales ha trabajado? Haga su propio juicio sobre las calificaciones del abogado haciendo preguntas. No se deje engañar por el encanto de la persona. La experiencia es el fundamento más importante para seleccionar un abogado. En el ejercicio del derecho hay que formarse opiniones. Una experiencia más extensa significa un mejor modo de opinar.
Una vez, un acusado que había sido arrestado por cargos de drogas me mostró la tarjeta de presentación de un abogado que él estaba interesado en contratar. El acusado estaba siendo encausado en un tribunal federal. Reconocí el nombre del abogado. Se ganaba la vida defendiendo a delincuentes callejeros y tenía mucho éxito en ese trabajo. Era una persona agradable, pero no tenía experiencia en causas federales de drogas. Pero como que el abogado tenía una personalidad encantadora, el acusado quería contratarlo. Una decisión errónea.
No elija un abogado basándose solamente en la recomendación de un amigo o de un familiar. Aunque un abogado en particular puede haber sido la selección ideal para su amigo, eso no significa necesariamente que el mismo abogado sea una elección ideal para usted. De nuevo, es como escoger un traje. No importa cuán bien luzca en otra persona, puede que no luzca bien en usted. Tiene que quedarle perfecto y sentirse cómodo con él. Si encuentra un abogado que tiene experiencia en su tipo de causa, entonces es sencillamente una cuestión de cuán cómodo se siente usted con él o con ella. Si usted puede elegir un amigo, también puede elegir un abogado.
Una vez que haya contratado un abogado, sin embargo, puede que usted opine que ha cometido un error. En ese caso, despídalo. Obtenga otro abogado tan pronto como se dé cuenta que está teniendo un problema. No espere hasta el final del caso. No importa cuánto dinero ya haya gastado ni si no le queda más dinero para contratar otro abogado. Es mejor conseguir un abogado nombrado por el tribunal que quedarse con un abogado en el cual no tiene confianza. No puede dejar que los acontecimientos o las finanzas dicten su destino. Obtenga el abogado que usted se merece.